Escapando de nosotros mismos

La prédica se centra en el relato de Elías en 1 Reyes 19:9-13, donde Dios se manifiesta a través de un susurro suave tras una serie de fenómenos naturales (viento, terremoto, fuego) que no contienen su presencia. Aquí, Elías expresa su frustración y miedo, sintiéndose solo en su celo por Dios y perseguido por quienes han abandonado su pacto.

## Resumen y Análisis:

**Contexto de Elías:**

- Elías ha estado enfrentando la oposición y la idolatría del pueblo de Israel, sintiéndose desolado porque cree que es el único que sigue a Dios.

- Dios lo llama a salir de la cueva y lo instruye a continuar su misión, lo que refleja que, aunque Elías se siente abatido, su trabajo no ha terminado.

**Historia del León:**

- Se narra una parábola sobre un león que, al ver su propio reflejo en el agua, huye asustado. Esta historia se utiliza para ilustrar cómo las personas a menudo escapan de sí mismas y de sus miedos internos.

- El león representa el miedo a enfrentar la realidad y cómo, a veces, lo que nos paraliza son nuestras propias percepciones.

**Temor y Propósito:**

- La prédica conecta el miedo de Elías y el león con la dificultad de enfrentar los propósitos de Dios. Al igual que Elías, muchos se sienten intimidados por las tareas que Dios les encomienda.

- Se hace un llamado a no dejar que el temor nos aleje de la misión que Dios tiene para cada uno, instando a que llevemos nuestros pensamientos cautivos a Cristo (2 Corintios 10:5).

**Acción y Fe:**

- La importancia de actuar de acuerdo a la voluntad de Dios se enfatiza, sugiriendo que debemos buscar Su guía en nuestras decisiones y proyectos.

- Se menciona que, aunque podamos sentir miedo, debemos recordar que Dios es un Padre amoroso que provee y dirige.

**Reflexión Final:**

- La prédica concluye con una exhortación a aprovechar las oportunidades que Dios nos brinda, reconociendo que debemos mantenernos en sintonía con Su voluntad.

- Se anima a los oyentes a levantar sus manos en rendición a Dios, incluso en medio de problemas, como un acto de fe y confianza en Su providencia.

## Conclusión:

La prédica es un llamado a enfrentar nuestros miedos, a permanecer firmes en la misión divina y a buscar la dirección de Dios en cada paso que damos. Nos recuerda que, a pesar de nuestras luchas internas, Dios sigue activo y presente, guiándonos hacia Su propósito.

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